A través de Sagitario   


Por: Bronny J. Sánchez.

 

La constelación de Sagitario, tal como su nombre lo indica, representa la figura de un centauro, una criatura con el cuerpo de un caballo, y el torso de un hombre. Pero, ante mi sigilosa vista, se asemeja más a una tetera, que nos sirve un delicioso café cósmico.

 

Pero este café está elaborado a base de objetos nebulosos, cúmulos de estrellas, estrellas dobles y múltiples, y tiene la gran distinción de estar posicionada en la región central de nuestra galaxia, La Vía Láctea, zona de alta densidad estelar y gaseosa, ideal para la observación a simple vista, y con el uso de instrumentos.

 

Esta zona también es un buen lugar para la búsqueda de novas comunes, y de hecho, en esta se han descubierto varios objetos de este tipo, muy interesantes. Entre estos, encontramos un objeto, descubierto en 1996, por el astrónomo amateur japonés, Yukio Sakurai, que fue identificada como una “nova lenta”. Pero estudios recientes muestran que este objeto, los cuales, son conocidos como “Gigantes nacidas otra vez”, representa a una estrella moribunda que pospuso temporalmente, su destino como un embrión estelar, al utilizar su pequeña cantidad de combustible, para crecer como una estrella supergigante por ultima vez.

 

La tetera de Sagitario, está conformada por las estrellas Lambda (λ), Phi (φ) y Delta (δ) Sagittarii, que forman la “tapa”. El “agarradero” de la tetera lo forman Sigma (σ) y Tau (τ) Sagittarii.

 

El “cuerpo” lo forman Zeta (ζ), Épsilon (ε) Sagittarii, en conexión con las estrellas de la “tapa” Phi (φ) y Delta (δ) Sagittarii. El “vertedero” por donde emana este café estelar, está formado por Gamma (γ) Sagittarii, también en conexión con Épsilon (ε) y Delta (δ) Sagittarii.

 

No importa que equipo utilicemos. Solo dos cosas nos serán de suma importancia para nuestra observación: Cielos oscuros y Experiencia. Si observamos con regularidad, gradualmente encontraremos más fácil, la detección de aquellos detalles y disposiciones presentes, y además, nuestro cerebro y ojos estarán trabajando de forma conjunta, y así, lograremos familiarizarnos con zonas y objetos débiles y de difícil detección.

 

Nosotros, los observadores de objetos de espacio profundo, hemos cultivado una técnica conocida como “Visión Lateral”, esto es, observar hacia un lado, fuera del objeto, y no directamente a este. Esto hace que el débil brillo de un objeto, se concentre en un área más sensitiva de la retina, haciendo que la observación del objeto, sea más fácil.

 

La noche del Martes 27 de Julio de 2010, el cielo se mostró despejado, lo suficientemente bueno para la observación.

 

Mi primer objeto observado fue el cúmulo globular M28. Este se encuentra a unos 2 grados de Lambda (λ) Sagittarii. Se muestra muy pequeño y difuso, siendo mas obvio, con visión lateral. Este no mostraba alguna concentración, sino que se asemejaba a una nube continua.

 

Más hacia el norte de Lambda, y a unos 4,2 grados de esta, observé el cúmulo globular M22. Este cúmulo, es uno de los más impresivos objetos del cielo. De magnitud 5.1, puede observarse a simple vista, bajo condiciones favorables. La M22 es uno de los cúmulos más cercanos a nosotros, localizándose a 10.000 años-luz.

 

A unos 1.5 grados de M22, encontramos al cúmulo globular NGC 6642, detallándose débil y difuso. De allí, a unos 2 grados de Lambda Sagittarii, otro cúmulo, NGC 6638, también mostrándose débil en su apariencia.

 

Hacia el norte de M22, a unos 2.5 grados, encontramos al cúmulo abierto M25, de magnitud 4,6. Se muestra con una ligera disposición en sus componentes, con cerca de una docena de estos. En M25 encontramos un huésped muy famoso. Nos referimos a U Sagittarii, una Cefeida Variable. Esta estrella, una gigante amarilla, varía de brillo, debido a la contracción y expansión de la estrella, en periodos regulares, en este caso, de una vez por semana.

 

U Sagittarii le toma menos de 5 días para su variación, que va desde su brillo máximo de 6,3 hasta el más débil, de 7,2. Su retorno a 6,3 le toma solo 2 días. En el mínimo, U Sagittarii es el tercer miembro más brillante de M25; en su máximo, es el más brillante.

 

Lo mas resaltante de esta observación, es la detección de los cúmulos M28, M22, NGC 6642 y NGC 6638, formando un cuadrado, con su variedad de brillo y morfología.

 

A unos 5,5 grados, también de Lambda Sagittarii, y muy cerca de Xi 1 (ξ1) y Xi 2 (ξ2) Sagittarii, se divisa el cúmulo abierto Collinder 394. Su disposición ligera en sus componentes, dejan ver algo más de una docena de estrellas.

 

Otro huésped, no menos famoso, y teniendo como referencia a Mu (μ) Sagittarii, se observa La Nebulosa de La Laguna, la M8, del catalogo Messier. La nubosidad brillante de esta cuna estelar es una de las características más resaltantes de este objeto, y en ella, se encuentra un grupo de estrellas, que generan y otorgan el brillo, hacia el exterior, iluminando la nube, siendo este cúmulo el NGC 6530. La nebulosa de La Laguna es una zona de formación estelar, y se estima que tenga unos 2 millones de años.

 

A pocos grados de La Nebulosa de La Laguna, hacia el norte y dentro del campo de visión de mis binoculares, encontramos a la Nebulosa Trífida, la M20. Mas péqueña que la M8, se detalla una ligera nubosidad y el contenido estelar que en esta se encuentra. Tal como su nombre lo indica, esta nebulosa se encuentra dividida en tres, detalle que le da la forma y nombre característico.

 

Más hacia el norte de estas dos nebulosas, encontramos al cúmulo abierto M23, el cual se observa débil, como una mota de algodón. De magnitud 5,6 se encuentra a 2.000 años-luz.

 

Variados son los objetos que podemos encontrar en Sagitario, en una noche clara y despejada. Cuando miramos hacia el Sur, desde acá, detallo la poca contaminación lumínica, en contraposición con el este, en donde la actividad humana y el entorno de la ciudad, son mucho más fuerte, limitando la observación de objetos de espacio profundo y estrellas, debido a la alta contaminación de la ancha banda del horizonte.

 

A pesar de no “tomar” del delicioso café estelar, que se despliega en los alrededores de la tetera de Sagitario, les aseguro que siempre, en mis observaciones, tengo a la mano una deliciosa taza de chocolate caliente!

 

Pero no se preocupen… Dejemos que la tetera de Sagitario, derrame todo su contenido estelar en nuestra observación!